La importancia de instrumentos de control ante el crecimiento urbano

Daniel Preciado Santana

La expansión de la mancha urbana hacia las periferias es producto de un deficiente ordenamiento territorial debido al aumento poblacional así como a la creciente tendencia de migración de personas a zonas urbanas. Según datos de los informes presentados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) a partir de 1960 se ha tenido un crecimiento poblacional sostenido en nuestro estado estimando un aproximado de 7.8 millones de habitantes según lo arrojado en la encuesta intercensal del 2015. Para el municipio de Zapopan se estiman 1,243,756 habitantes en una superficie de 1,163.6 km²  siendo el segundo municipio del estado con mayor población solo después de Guadalajara, sin embargo el índice de habitantes por kilómetro cuadrado es menor siendo 1,068.9 en comparación a Guadalajara el cual es de 9,874.4. Esto se debe a la inmensa extensión territorial de Zapopan en comparación a cualquier otro municipio del Área Metropolitana de Guadalajara (AMG). Cabe recalcar que gran parte de esta extensión territorial del municipio se da en las periferias del mismo no comprendidas en la constante conurbación metropolitana.

Ante el hecho del aumento en el valor de la tierra en zonas urbanas principalmente dentro del AMG, la adquisición de vivienda en las periferias de la ciudad ha surgido como una opción a considerar, sin embargo las áreas periurbanas tienen características de transición entre lo rural y lo urbano por lo que la infraestructura urbana existente pudiese no ser la más adecuada para soportar asentamientos de gran densidad, además del impacto ambiental generado. Casos como el de Valle de los Molinos el cual es un claro ejemplo de un asentamiento urbano fallido desde su concepción tanto por su ubicación como por la ausencia de desarrollo y renovación en la infraestructura de la zona, deja entrever las problemáticas generadas por el desinterés histórico y políticas de ordenamiento territorial deficientes ya que el mismo fraccionamiento alberga a un aproximado de 200 mil habitantes que conforman un asentamiento de gran densidad, confinados en el kilómetro 11 de la carretera Colotlán, son un aproximado de 18 km de recorrido  hasta el entronque de carretera a Tesistán y Periférico lo que la vuelve un área periurbana por sus características. Ante esto Zapopan ha tomado cartas en el asunto al aprobar recientemente la actualización del Programa de Ordenamiento Ecológico Local de Zapopan (POELZ) con el cual se busca establecer límites a la creciente mancha urbana con base a las condiciones actuales del municipio.

Si bien no todas las ciudades cuentan con las mismas características territoriales y poblacionales, la existencia de este tipo de asentamientos que generan dispersión urbana desordenada y de gran densidad son notorios en todo el país, por lo que es necesaria la creación o en su caso, la actualización y fortalecimiento de instrumentos normativos que dicten criterios de ordenamiento en el que se contemplen tanto las zonas urbanas como las áreas naturales y agrícolas.

Referencias:

Ávila Sánchez, Héctor. (2001). Ideas y planteamientos teóricos sobre los territorios periurbanos: Las relaciones campo-ciudad en algunos países de Europa y América. Investigaciones geográficas, (45), 108-127. En http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0188-46112001000200008&lng=es&tlng=es.

INEGI. (2015). Información poblacional por entidad. En http://www.cuentame.inegi.org.mx/monografias/informacion/jal/poblacion/dinamica.aspx?tema=me&e=14

Montalvo, R. (2007) Hacia un modelo de crecimiento ordenado de los centros de población en el Estado de Tlaxcala. En www.eumed.net/tesis/2007/rmv/